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Luciferismo
DEL CAMINO DE SABIDURÍA
Podriamos decir, que es uno de los cultos mas antiguos, donde
fluye el estudio de aquel saber magico perdido, que se transmitio, en muchos de los casos
atraves de sociedades secretas, debido a la persecucion de la Iglesia. Una de las
sociedades secretas mas apasionantes es el Luciferismo, tanto por su historia, como por
sus rituales, que se pierden en la noche de los tiempos
¿Sois satanistas?
Preferimos denominarnos "luciferinos", ya que el término "satanista"
ha quedado muy deformado por la obra de Anton Szandor Lavey y sus sucesores. Éstos
postulan un satanismo light, muy a la moda, que es en realidad un movimiento filosófico y
estético de corte liberal.
¿Entonces vosotros qué decís?
Pues no somos tan modern@s. Nosotros si que creemos en la existencia de los seres
conocidos como demonios, les rendimos culto y en ocasiones interactuamos con ellos.
¡Anda ya! ¿Cómo podéis creeros eso?
En realidad, no es tan duro. Hay mucha gente que cree que del agua se puede sacar vino,
que la Virgen se aparece a los pastorcillos para darles instrucciones políticas o que su
mascota está en la rueda del karma. El luciferismo no exige tanto de la buena fe de sus
creyentes. Creemos que existe una realidad subyacente a la visible, que esta realidad
interconecta a todo y a todos y tiene sus propias reglas, leyes y entidades, y que el
respeto, la consciencia y relación con estas reglas, leyes y entidades es favorable para
quienes las practican.
La existencia de una realidad subyacente con sus propias leyes,
reglas, entidades y fenómenos que son los que realmente definen a la realidad que todos
podemos ver ha sido recientemente validada por la Mecánica Cuántica y la Matemática del
Caos.
¿Y eso qué tiene que ver con Lucifer o el luciferismo?
La consciencia de que estas reglas, leyes, entidades y fenómenos existen no es nueva,
aunque sólo en tiempos recientes hayan sido demostradas por la Ciencia. De hecho se
conocen desde los orígenes de la Humanidad, pues son realmente fáciles de percibir
cuando no se está cegado por la moral con que las grandes religiones y modelos sociales
nos vienen "obsequiando" en el último par de milenios.
Tan evidentes son, que tuvieron que asustar a la gente para que
no se les ocurriera acercarse a ellas. Inventaron así una "demonología
monoteísta", en la que las reglas, leyes, entidades y fenómenos de la realidad
subyacente jugaban el papel de "malos" (así ellos eran, automáticamente, los
"buenos" -como en las historias de policías y ladrones). El público más
ignorante aprecia fácilmente estas historias de buenos y malos, y ellos supieron
utilizarlo.
Las reglas, leyes, entidades y fenómenos de la realidad
subyacente quedaron así convenientemente "demonizadas", y los símbolos
materiales o personales que las representaban también.
¿Y qué tiene que ver con el luciferismo?
En latín clásico, Lucifer es el "Portador de la Luz", la fuerza-entidad
que se encuentra tras el conocimiento y la sabiduría, simbólicamente asociado en la
astronomía romana al planeta Venus, más conocido como el lucero del alba (la estrella de
la tarde, aunque también es Venus, era conocida como Hesperus). El conocimiento y la
sabiduría fueron convenientemente demonizados por las grandes religiones monoteístas. En
la cristiana, por ejemplo, la causa de la expulsión del Paraíso Terrenal es "comer
del árbol de la ciencia del bien y del mal"... ¡toda una declaración de
principios!. Y Lucifer, el Portador de la Luz, se convirtió así en el rey de los
demonios, el más malvado de entre los malvados, el que había tenido el
"orgullo" de enfrentarse al falso dios de quienes siempre han tenido a la
ignorancia, la hipocresía y las apariencias como principales aliadas.
Por ello, quienes queremos tener al conocimiento, la naturaleza y
la sinceridad como valores máximos, nos reconocemos en Lucifer, le rendimos culto y nos
denominamos "luciferinos".
¿Se trata de eso... de venerar a un símbolo?
En absoluto. A diferencia de los denominados "satanistas" de LaVey y sus
sucesores, nosotr@s hemos experimentado la existencia real de Lucifer y otras
fuerzas-entidad de la realidad subyacente. Creemos en ellas porque tenemos experiencia
directa de ellas y de los beneficios que otorgan a quienes las siguen.
¿Qué clase de beneficios?
De todo tipo. Entre las más básicas están la claridad de pensamiento y de emociones,
que mantiene alejados a los miedos y a la confusión; una mejor comprensión del mundo,
las personas y la realidad, lo que incide en un rápido éxito social y personal. También
la capacidad de satisfacer nuestras necesidades y deseos legítimos sin enfermizos
sentimientos de culpabilidad. La sabiduría suele ir igualmente asociada a una cultura muy
por encima de la media, que permite acceder a ámbitos vedados a muchas personas. Y, por
supuesto, y el saberse protegid@ y auxiliad@ por fuerzas y entidades verdaderamente
poderosas. Conforme se va avanzando en el contacto con las fuerzas y entidades
luciferinas, los beneficios se van haciendo inmensos y evidentes para cualquiera, en estos
aspectos y en muchos otros, aún más importantes.
Si creeis en Lucifer, entonces creeréis en Dios, ¿no?
En el dios de las grandes religiones monoteístas -Yahvéh, Jeováh, Alá, etc- no, desde
luego. Estos dioses si que son el invento de determinados imperios para mantener
controlados y atemorizados a sus súbditos. Son estos dioses, convenientemente ideados a
imagen y semejanza de los intereses de ciertos individuos, los que se utilizaron para
desplazar en la imaginación popular a las verdaderas deidades: las fuerzas y entidades de
la realidad evidente y de la realidad subyacente, estudiadas, de muy distinta forma, por
la Ciencia y por el Luciferismo.
La Ciencia, afortunadamente, ya se libró del yugo de estos
falsos dioses hace más de dos siglos. Ha llegado ahora el momento de liberar a la Fé y
devolver al ser humano a la felicidad.
¿Qué significan la serpiente y el pentáculo invertido?
La serpiente, alegoría del conocimiento, simboliza a Lucifer y a las demás entidades de
la realidad subyacente, llamadas demonios por los monoteístas. La identificación de la
serpiente con la sabiduría se halla a lo largo de toda la Historia Antigua, y muy
especialmente en la tradición hindú, donde las serpientes se nos muestran como los
Grandes Maestros, los Hombres Sabios y los Espíritus de Luz que viven en el Patala, cuya
traducción más literal es... el Infierno. El Infierno es en realidad el llamado
Inframundo por gran cantidad de religiones de la Antigüedad -especialmente las
Mesopotámicas-, que supieron percibir de esta manera sencilla la existencia de lo que
nosotros llamamos realidad subyacente. CLUV emplea como símbolo a una variedad de
serpiente llamada vipera nikolskii, un tipo de áspid que se encuentra en Rusia, conocida
por su extrema inteligencia, astucia y letalidad.
El pentáculo invertido es un pentagrama (estrella de cinco
puntas) circunscrito por una circunferencia, que apunta hacia abajo. Este símbolo viene
usándose desde hace al menos 8.000 años, probablemente mucho más, y es conocido como la
estrella de la vida. Tiene incontables significados y poderes. El que más cercano queda a
la tradición occidental pertenece a la escuela de Pitágoras, en la Grecia clásica. Para
Pitágoras (matemático, músico, político y filósofo) la estrella de cinco puntas
representaba la esencia divina o espiritual del ser humano. La nuestra es una fé centrada
en la persona, en el ser humano, en su bienestar y en su sentido de la trascendencia. La
circunferencia que la envuelve representa al Cosmos, finito pero ilimitado, como un anillo
sin fin (algo en lo que la Ciencia viene a estar de acuerdo, una vez más). El Pentáculo,
pues, representa al ser humano integrado y en armonía con la totalidad del Cosmos. Y
apunta hacia abajo porque nosotros no creemos en el "Cielo", sino en el
Inframundo, que las antiguas religiones mesopotámicas colocaban "abajo"; y
porque somos telúricos, siempre gozando de nuestra relación con nuestra propia
naturaleza y con la de la Tierra y el Universo.
Esto es una explicación lo más sencilla posible de lo que
representan la serpiente y el pentáculo invertido. Existen otros muchos niveles de
simbolismo para ambos. Y no son los únicos símbolos que utilizamos.
¿Existe la vida después de la muerte?
Si, y de más maneras que muchos se creen. Lo que llamamos vida, de hecho, no es más que
una manifestación en la realidad evidente, material, de una entidad que se halla ubicada
en el plano de la realidad subyacente, y que se puede manifestar en distintos planos,
niveles y momentos de maneras distintas y bajo formas diferentes. Algunas religiones
orientales supieron darse cuenta de esto y lo manifestaron bajo la doctrina de la
reencarnación, que es una aproximación simplista a lo que ocurre en realidad. Casi todas
las religiones tienen una doctrina sobre el alma, que es también una visión simplona de
esta entidad subyacente, a la que nosotr@s llamamos entidad espiritual o madre.
¿Qué opináis de Cristo, Mahoma, Buda y los profetas?
Que fueron, sin duda, personajes destacados en su tiempo. Otra cosa es lo que sus
sucesores han hecho con su mensaje. La deformación ha sido tan grave que en la actualidad
no queda nadie que sepa lo que realmente enseñaron, y un sencillo vistazo a las
investigaciones históricas contemporáneas sobre ellos y sus doctrinas basta para
demostrarlo.
HISTORIA CLÁSICA Y CONTEMPORÁNEA
Cuéntame una historia breve del luciferismo, pero sin
enrollarte, ¿vale?
OK. Lo que hoy en día tenemos que llamar luciferismo es la religión natural del ser
humano desde sus orígenes, consciente de su relación íntima con el entorno, con los
demás y consigo mismo. Se hace evidente a la Humanidad en el Paleolítico, se extiende a
todo lo largo del Neolítico y adquiere formas variadas y ricas cuando se crean las
primeras civilizaciones, en Egipto, en el Creciente Fértil mesopotámico y en la América
precolombina.
Con la consolidación de los Imperios y los Ejércitos, una serie
de tiranos sienten la necesidad de sustituir estas creencias naturales, lógicas y
telúricas por creencias en dioses unipersonales y totalitarios, una especie de
"machos alfa" colectivos: son las grandes religiones monoteístas occidentales,
el judaísmo, el cristianismo y el Islam. La persecución de la religión natural se
convierte pronto en un baño de sangre, una operación de exterminio. En Occidente, la
caída de Roma en manos de los cristianos y su consecuente destrucción representa el
final de cualquier posibilidad de restaurar la religión natural. No obstante, su
práctica sigue siendo realizada por pequeños colectivos, y está profundamente arraigada
en la cultura popular, reapareciendo una y otra vez.
En Europa, por fin, en torno al 1.200 los cristianos lanzaron una
operación de exterminio, una "solución final" que se saldó con la
eliminación física de todo aquél que no acatase sus sandeces con fé de carbonero: son
los Tiempos del Fuego. Esta persecución se extendió a América y otros continentes. No
obstante, la religión natural, como es lógico, ha vuelto a reaparecer (en realidad,
nunca lograron destruirla del todo) y... aquí estamos, funcionando a nuestra manera,
mientras ellos, poco a poco, van perdiendo su supremacía social y política.
¿Qué son los Tiempos del Fuego?
Llamamos Tiempos del Fuego a un periodo de persecuciones fomentado por el poder
eclesiástico que se extiende entre el año 1.200 y el año 1.800, donde varios centenares
de miles de personas, probablemente millones, fueron exterminados por las grandes
religiones monoteístas occidentales. Por ejemplo, la Iglesia Católica y numerosas
comunidades protestantes torturaron y asesinaron, en parodias de juicio, a 175.000
supuestas brujas, satanistas, luciferinos y otras personas de comportamientos y creencias
"antisociales". Estos son los datos oficiales; una cifra hasta diez veces mayor
pudo ser asesinada por turbas de linchamiento y otras "iniciativas populares"
animadas y permitidas por estas iglesias. Millones de libros y otros documentos fueron
quemados o secuestrados hasta el presente. Nunca ha habido una disculpa por estos hechos.
Aunque esta persecución organizada y sistemática cesó hace 200
años, entre el 1.800 y la actualidad han sido asesinadas al menos otras mil personas por
ser supuestos "brujos", "satanistas" o "luciferinos". El
último fue un anciano indio, Uppala Pochaiah, apaleado hasta la muerte por sus vecinos el
6 de noviembre de 2.000.
¿Qué apariciones de Lucifer están suficientemente
documentadas?
Existen miles de referencias históricas y literarias sobre las apariciones de Lucifer en
prácticamente todas las culturas y tiempos. Incluso algunas ramas ultras de los
protestantes cristianos consideran que las muy pródigas apariciones marianas son, en
realidad, obra de Lucifer. Sea como fuere, el hecho es que Lucifer no es un caballero
vergonzoso, pero si muy escurridizo: se manifiesta en bastantes ocasiones, pero no le
gusta dejar muchas pruebas de su presencia.
CLUV puede testimoniar tres de Sus visitas en los últimos 30
años: una en 1.971, que dio lugar a la creación de nuestro grupo. La segunda fue en
1.984 y la tercera, en 1.997. Todas ellas fueron intensas y esclarecedoras, una
experiencia más allá de la vida y de la muerte, que nos llenaron de felicidad, plenitud
y sabiduría... no es posible describirlo con palabras.
Sus signos, y la aparición de otras entidades, ocurren con mucha
más frecuencia en la vida cotidiana de tod@s'; return true;" onmouseout="window.status=''; return true;">tod@s nosotr@s. Sólo hay que mirar con ojitos de
ver...
No se quién es ese Anton Szandor LaVey, pero parece que no os
cae muy bien...
Vaya por delante que es preciso hablar de él aunque, efectivamente, no nos caiga muy
allá. Howard Stanton Levey, pues ese era su verdadero nombre, nació en Illinois (EE.UU.)
en 1.930 y murió en California en 1.997. Era un histrión megalómano que ideó un
"satanismo" muy al gusto moderno que le valió llegar a la fama, relacionarse
con famosos de su época y vivir razonablemente bien el resto de sus días. Este satanismo
leveyano, en realidad, es más bien una filosofía personal cercana al libertarianism
norteamericano unida a una estética chocante de corte gothic. Está basada en la obra de
Alesteir Crowley, Gerald Gardner y Eliphas Levi, con la perspectiva del movimiento Golden
Dawn. Escribió un par de libros que merecen la pena a título formativo, y unos cuantos
más bastante flojos. En 1966 o 1967 fundó la Iglesia de Satán, con gran impacto en los
medios de comunicación social y alarma de los ultras norteamericanos, que llegó a tener
10.000 miembros en todo el mundo -con muy distintos niveles de implicación- y a su muerte
se dividió en varios grupos.
A Anton LaVey se le considera el padre del satanismo
contemporáneo, aunque en realidad no fundó más que un movimiento filosófico bastante
flojo que apareció en unos momentos de fuerte perturbación social y se extinguió
rápidamente. Algunas de sus escisiones incorporaron un sentimiento religioso al
filosófico, sin demasiado éxito. En la actualidad, las diversas iglesias satánicas
leveyanas tienen una importancia marginal, pese a estar reconocidas por instituciones como
el Ejército de los Estados Unidos. Su obra vital más importante fue dar los primeros
pasos hacia la "desatanización del satanismo" (!). Sus Nueve Mandamientos
Satánicos son una buena, aunque incompleta, plasmación de la filosofía moral que se
desprende de las fés satánicas.
DEMONOLOGÍA
¿Qué es el Infierno?
El Infierno es la denominación cristiana latina del Inframundo (Netherworld) del que han
sido conscientes todos los pueblos, culturas y civilizaciones desde los orígenes de la
Humanidad hasta que las grandes religiones monoteístas occidentales implantaron su muy
particular versión de la ceguera y la estupidez. El llamado "Infierno" es la
realidad subyacente, donde ocurren todos los fenómenos y se generan todas las leyes y
acontecimientos que configuran la realidad evidente, la de todos los días.
¿Qué son los Demonios?
De la misma manera que la realidad subyacente es capaz de crear seres vivientes y
conscientes en la realidad evidente, es capaz de hacerlo en la propia realidad subyacente.
Los "demonios" son fuerzas-entidad vitales y con personalidad propia del
Inframundo, que se manifiestan o no en la realidad cotidiana de maneras muy diversas.
Algunos seres humanos y de otras especies biológicas somos
también "demonios", sujetos a unas reglas especiales durante un periodo
determinado de nuestra existencia por distintas causas: nuestra naturaleza básica
(nuestro espíritu o alma) se encuentra en el Inframundo, pero nuestra manifestación, en
este momento específico, se encuentra en el mundo evidente, fijada a él durante un
tiempo determinado por una buena razón.
¿Quién es Lucifer?
Lucifer, el Portador de Luz, es la más poderosa de las fuerzas-entidad de la realidad
subyacente. Desde la perspectiva humana, sus poderes y sabiduría son prácticamente
ilimitados.
¿Qué otras entidades hay?
¡¡Muchas!!
¿Cómo influyen en el ser humano?
A todos los niveles... de hecho, constituyen la naturaleza básica de una cantidad
significativa de nosotr@s. Influyen directamente sobre la salud, el estado anímico y
psicológico, los acontecimientos cotidianos y sobre nuestra relación con los demás y lo
demás.
¿Cómo me puedo relacionar con ellas?
Ya te relacionas con ellas, sólo que sin saberlo. La inconsciencia de esta relación
provoca en muchas personas confusión, ansiedad, desorientación, depresión y otros males
psicológicos. Para interactuar con ellas de manera consciente y obtener los resultados
deseados, son necesarios ciertos ritos, prácticas y observancias.
RITOS, MITOS Y LEYENDAS
¿Qué ritos practican l@s luciferin@s?
Sintiéndonos parte de todo lo que existe, empleamos diversos ritos para reforzar esta
relación y mantenernos en contacto con las fuerzas de las que nace todo. Puedes echar un
vistazo a algunos de ellos pulsando aquí.
¿Son obligatorios, esos ritos?
No. Es más, está específicamente prohibido que una persona realice un determinado
ritual, o participe en él, si no lo siente. No nos gusta que la gente se sienta obligada
a participar, o participe por mantener las apariencias.
¿Existen rituales como el bautismo, el matrimonio, la
extremaunción, etc. de los cristianos?
Estos rituales cristianos, en realidad, son modificaciones de ritos mucho más antiguos y
de mucho mayor significado. L@s luciferin@s utilizamos ritos especiales para la llegada a
la vida, las uniones vitales o espirituales (no sólo el matrimonio convencional), los
descubrimientos espirituales, los proyectos vitales, los proyectos espirituales y la
despedida de la vida, con gran significado, enorme belleza y verdadera implicación
colectiva.
Los ritos luciferinos nunca son obligatorios y no
"sancionan" o "reconocen" el hecho vital en cuestión. ¡Nadie tiene
derecho de hacer tal cosa, más que la propia persona! Lo que hacen, en su lugar, es
sacralizarlo, hacer que el hecho en cuestión sea trascendido hasta los últimos niveles
de la existencia, convertir al hecho en parte de la estructura cósmica. Ya, es un poco
difícil de entender e incluso suena raro. En realidad es algo mucho más lógico y
natural que todo eso, pero el lenguaje contemporáneo resulta un tanto inadecuado para
expresarlo.
RELIGIONES Y TOLERANCIA RELIGIOSA
¿Cuál es la actitud luciferina hacia las demás religiones?
Pues solemos aplicar un principio de reciprocidad limitada. En román paladino, que las
tratamos igual que ellas nos tratan a nosotr@s, aunque nosotr@s no les perseguimos a ellos
y ellos a nosotr@s si. Por razones obvias, sentimos una particular simpatía por las
creencias naturalistas y neopaganas, y un especial desprecio por las religiones
monoteístas occidentales: el cristianismo, el judaísmo y el islamismo.
¿Qué significa eso de "especial desprecio por las
religiones monoteístas occidentales"?
Eso: que nos caen mal. Que no nos gustan. Que sus enseñanzas y su moral nos parecen
totalitarias, infames y despreciables. Que vemos a sus dirigentes como dictadores y a sus
seguidores como una potencial turba de linchamiento sedienta de sangre ajena y dispuesta a
saltar contra cualquiera que no idolatre los turbios valores de su idiocia, conformismo,
egoísmo y mediocridad.
¡No podéis pasaros así con la gente!
En realidad, no es ni la milésima parte de lo que ellos se pasan con nosotr@s, con
muchísimas menos razones. Y no hablamos sólo de los Tiempos del Fuego, la persecución
mediática y otras cosillas por el estilo, que ya de por sí solas serían suficientes
como para que no les dirigiésemos la palabra, como poco. Sigue leyendo y verás a que
extremos llegan, en pleno siglo XXI.
ABUSOS RITUALES Y SÍNDROME DE FALSA MEMORIA
¿Qué es el abuso ritual satánico?
El gran fraude del sensacionalismo anti-satanista es, sin duda, el llamado "Crimen
Ritual Satánico", más conocido por sus siglas en inglés S.R.A. (satanic ritual
abuse). En el seno de diversas comunidades de trabajadores sociales, terapeutas,
cristianos conservadores y policías se extendió un "pánico satánico" a
principios de los años ’80. Estas personas, y el público en general alertado por
los medios de comunicación, comenzaron a creer que una amplia red secreta, oculta, de
sectas satánicas estaban dedicándose a secuestrar niños, abusar de ellos física y
sexualmente, matarlos e incluso comérselos. Es fascinante observar cómo nadie,
aparentemente, ha reparado en que estas son exactamente las mismas acusaciones que
falsificaba la Inquisición en la Edad Media. Sea como fuere, estos temores se extendieron
como la espuma y alcanzaron su cénit a principios de los ’90, sobre todo en los
países de habla inglesa. Poco a poco fueron decreciendo ante la falta de pruebas o
evidencias de cualquier tipo, y hoy en día la mayoría de profesionales de la salud,
policías, etc. creen que el S.R.A. no es más que una leyenda basada en falsas memorias.
Las falsas memorias (ver la pregunta ¿Qué es el síndrome de falsa memoria?) se inducen
a los pacientes mediante terapias de recuperación de la memoria e investigación en la
infancia que ahora se consideran aberrantes.
En la actualidad, el S.R.A. vive sobre todo en los tribunales de
justicia, donde las víctimas de estas terapias incompetentes y peligrosas están
demandando a sus terapeutas por haberles inducido falsas memorias. A veces, los acuerdos
extrajudiciales han representado idemnizaciones de millones de dólares. El concepto de
Síndrome de Personalidad Múltiple (al que ahora se le llama Síndrome de Indentidad
Disociativa) fue también extraido de la terapia de recuperación de memoria y el S.R.A.
Sus proponentes afirman que algunas personas tienen personalidades distintas que coexisten
en el mismo cuerpo. La creencia en el Síndrome de Personalidad Múltiple o Identidad
Disociativa está también en extinción, y los profesionales de la salud mental creen que
es iatrogénico, es decir, que no aparece de manera natural sino como el resultado
artificial de la interacción terapeuta-paciente. Cuando se separa al paciente del
terapeuta incompetente (y de los grupos de apoyo, libros de auto-ayuda, etc.), las
personalidades alternativas desaparecen.
A pesar de todas estas pruebas, aún quedan muchos individuos y
grupos que intentan alarmar al público con el S.R.A. mediante seminarios, páginas web,
artículos, libros, etc.
¿Quién lo inventó?
El S.R.A. ha estado presente en los países de fuerte tradición cristiana a lo largo de
los siglos. Los cristianos más conservadores creen en la existencia de Satán como una
especie de semidios perfectamente vivo y presente en la vida cotidiana, todo maldad. Y de
la misma forma que Dios tiene unas iglesias que extienden la creencia y los ritos
cristianos, algunos dieron por sentado que Satán debía tener una organización propia
para desempeñar la misma función. Exactamente igual que los demonólogos medievales.
La creencia extendida en el S.R.A. se disparó en 1.980 cuando
apareció el primer libro publicado por una "superviviente". El título era
Michelle Remembers (Michelle recuerda). Describía horribles abusos físicos y sexuales
sufridos por la coautora Michelle Smith en su infancia. Afirmaba que los agresores eran
satanistas que pensaban que el dolor infligido a su víctima aumentaba sus poderes
mágicos. También decía que practicaban el sacrificio humano y el canibalismo. Michelle
Remembers se presentó como un libro sobre un tema real, no como una obra de ficción.
Pronto empezaron a aparecer secuelas, pese a que nadie había verificado que tales sucesos
ocurrieran realmente y a que se descubrió que la supuesta víctima iba al colegio con
normalidad durante ese periodo, en el que se suponía que había estado encerrada en un
sótano. ¡Incluso le hicieron una foto para el álbum escolar!
No había casos de S.R.A. documentados antes de 1.980. Todos
ellos siguieron a la publicación de Michelle Remembers; hubo numerosos casos judiciales
sobre abusos que eran exactamente iguales a los descritos en el libro. La Red de
Información Wicca realizó una investigación y descubrió que la obra era un fraude, lo
que fue confirmado de manera independiente por los autores del libro El Silencio de
Satán. También se supo que los rituales descritos por el otro coautor de Michelle
Remembers, el Dr. Lawrence Pazder, tenían sospechosas similitudes con sus estudios
previos sobre religiones nativas africanas.
Se desarrolló una industria del S.R.A. Muchos cristianos
fundamentalistas y algunos evangelistas se unieron al circuito de seminarios,
conferencias, libros y programas de radio y televisión dedicados a promover el
"pánico satánico". Entre ellos se contaba Mike Warnke, después denunciado
como un estafador por sus correligionarios evangelistas. Estos autores y conferenciantes
definieron el término "satánico" de tal manera que incluía al neopaganismo,
la Nueva Era, la Santería, la Wicca, y, en general, todo lo que no fuese beatos
cristianos del Antiguo Testamento. Se dedicaron a extender las sospechas, la
desinformación y la intolerancia en cada localidad que visitaban. Y lo hicieron durante
años.
Muchos policías se unieron a esta "industria" desde el
principio. Habían sido convencidos de que los satanistas estaban, literalmente,
cometiendo numerosas torturas y asesinatos sin ser procesados gracias a alguna
conspiración. Pero pronto se dieron cuenta de que no había ninguna prueba, ni siquiera
la más remota, que apuntase en esa dirección. "No había cadáveres, no había
huesos, no había manchas de sangre... no había nada" -declaró posteriormente uno
de ellos.
Razonaron que si el testimonio de los "supervivientes"
era cierto, debería haber algún tipo de pruebas. Sin embargo, no aparecían por ninguna
parte. Por ejemplo, los túneles bajo la Escuela de Preescolar McMartin, en California,
que muchos "supervivientes" incluían en sus falsas memorias, nunca existieron
(se llegaron a hacer búsquedas arqueológicas para hallarlos, sin éxito; y es que nunca
estuvieron allí). En la actualidad, la mayor parte de los policías norteamericanos son
extremadamente escépticos con respecto al S.R.A. Han pasado dos décadas desde la
publicación de Michele Remembers... y sigue sin aparecer ninguna prueba de tales
crímenes.
Muchos psicólogos, psiquiatras, terapeutas y asesores
espirituales, en especial procedentes de los colectivos feministas y cristianos, se
unieron a la "industria". Entre ellos se contaban Kee McFarlane, que diseñó un
procedimiento de manipulación mental altamente eficaz a la hora de generar falsos
recuerdos e imaginaciones en los niños; Roland Summit, que afirmaba que había que creer
a las supuestas víctimas por increíbles que fuesen sus historias (¡incluso aunque
fuesen contra toda lógica!); o Pamela Hudson, que como si fuera un Heinrich Kramer de los
tiempos modernos, describió con todo detalle los síntomas y tipos de rituales que jamás
existieron. Otros "investigadores" concluyeron que las minúsculas
irregularidades en los hímenes de las chicas, la existencia de respuesta sexual en niños
pequeños o la respuesta a la estimulación anal constituían pruebas irrefutables de
estos abusos, y algunos laboratorios médicos creyeron detectar bacterias de transmisión
sexual en los niños. Todas estas "investigaciones" se demostraron falsas tan
pronto como fueron repetidas por profesionales independientes y cualificados, o el
resultado de procesos normales, naturales y no traumáticos.
¿Qué es el síndrome de falsa memoria?
Consiste en hacer creer a una persona, bajo técnicas de hipnosis o sugestión, que vivió
realmente experiencias -normalmente traumáticas- que sólo existen en su imaginación o
en la de la persona que se las sugiere. Curioso como pueda parecer, no es particularmente
difícil sugerir falsos recuerdos a una persona -y en particular a un niño o niña- a lo
largo de prolongadas y abrumadoras sesiones de hipnosis y sugestión. Estas "memorias
recuperadas" son normalmente de tipo sexual y según los expertos sólo se
corresponden con sucesos remotamente reales en un 17% de los casos.
"Remotamente" significa que puede ser que algo ocurriera, pero desde luego no lo
que recuerdan que ocurrió. En el 83% restante de los casos, se trata de falsos recuerdos
totalmente fabricados por la mente humana.
Una vez encendida la mecha, otras personas, que no han sufrido
tales sesiones, pueden adoptar también como propias algunas de estas falsas memorias
mediante mecanismos de réplica o imitación infantil o adulta bien estudiados por los
profesionales de la salud mental.
¿Entonces no hay ninguna prueba del abuso ritual satánico?
Ninguna. Rien. Niente. Cap. None. Nichevo. Es más, todas las pruebas realizadas por
diversos organismos policiales y judiciales han concluido más allá de toda duda que el
abuso ritual satánico jamás existió. En el caso de la Escuela Infantil McMartin, donde
las supuestas víctimas se contaban por centenares, se desarrolló una investigación que
implicó a cientos de policías y agentes judiciales (con la "ayuda" de otros
tantos periodistas sedientos de morbo) y se practicaron estudios, análisis y pruebas
valorados en decenas de millones de dólares. Incluso, como ya se ha dicho, se realizó
una excavación arqueológica en busca de los túneles donde las supuestas víctimas
habían estado encerradas, bajo la constante vigilancia de la prensa y otros fanáticos de
todo pelaje. Nada de todo ello existía.
¿Cuántos crímenes han cometido los satanistas?
En los siglos XX y XXI, únicos donde es posible tener referencias históricas y
jurídicas más o menos precisas, ninguno.
¿Y por qué todo el mundo cree que si?
Por dos razones. La primera es que la contaminación monoteísta de los últimos dos mil
años ha calado profundamente en la imaginación popular, y los satanistas y luciferinos
hacemos un malo muy malo, del gusto de la maniquea moralina social vigente. La segunda es
porque a los medios de comunicación les encanta presentar como crímenes satánicos a lo
que en realidad son crímenes cristianos, anti-satánicos, como los supuestos
"exorcismos" que acaban con la vida del pobre exorcizado (en España no hace
mucho ocurrió el «crimen de Almansa», donde a una niña de 11 años le sacaron las
tripas por la vagina entre su madre y unas vecinas, durante un ritual de tipo cristiano,
creyendo que le sacaban al "Demonio". En 1990 ocurrió el «crimen del
Albaicín», donde la muerta fue Mª Encarnación Gómez, asesinada también para
"sacarle al Diablo". Que se sepa, similar destino han sufrido más de
veinticinco personas en los últimos 25 años, sólo en España; en algunos países ha
habido recientemente "cazas de brujas" con centenares de asesinados, hombres,
mujeres y niñ@s... ¡menos mal que estamos en el siglo XXI !).
Ayuda el que algunos chalados, cuando son detenidos, afirman que
cometieron sus delitos "porque el Diablo se lo ordenaba" y locuras similares.
Ninguno de estos tuvo nunca relación alguna con ningún movimiento satánico, y mucho
menos luciferino; en las evaluaciones psicológicas, todos ellos resultan ser cristianos
que se explican sus chaladuras achacándoselas al "Demonio", o simplemente
listos que pretenden obtener una condena menor por enajenación mental.
También ayudan las increíbles estadísticas del Ministerio del
Interior (dirigido por D. Jaime Mayor Oreja, cercano al Opus Dei), que tiene la
desfachatez de afirmar que "la mayoría de las sectas que operan en España [unas
2.000 creencias no oficiales, con 250.000 seguidores] son satánicas". ¡Ya nos
gustaría, ya! O de la Conferencia Episcopal, que dice que hay "70 sectas satánicas,
con más de 25.000 seguidores" (imaginamos que incluyen a cada grupillo de chavales
que pinta un par de cruces invertidas en el cementerio de su pueblo, porque si no, no nos
salen las cuentas). Y cómo no, las mentiras estúpidas de la Fundación Veritas (!), de
la Iglesia Católica, la nueva Inquisición Española que ataca a todo y todos los que no
olemos a sahumerio, pie de monja y tanque bendecido. Por cierto, que al gurú de esta
secta, el padre Priscilio Ruiz, aún no sabemos quién lo apuñaló, porque los satanistas
no fueron, ¿verdad, mis queridos e ignorantes medios de comunicación social? ¿A qué se
debe el tupido manto de silencio después de tanta escandalera anti-satánica?
¿Qué ha pasado con los acusados de abuso ritual satánico?
Perdieron sus trabajos y sus vidas. Fueron encarcelados y abusaron de ellos en la cárcel
como violadores de menores. Fueron demonizados por los medios de comunicación social, y
presentados como terribles criminales ante millones de espectadores estúpidos. Sufrieron
palizas, violaciones, insultos, desprecios, confinamiento solitario, el abandono de sus
familias, el odio de sus amigos... algunos se suicidaron, otros tuvieron que irse a vivir
a lugares remotos, solos y olvidados. Cuando fueron puestos en libertad, los sacaron por
la puerta falsa, con los medios de comunicación mirando para otro lado. Y todos ellos
eran inocentes: totalmente inocentes. Muchos de ellos incluso eran "buenos
cristianos" (imaginamos y esperamos que ya no lo serán tanto, aunque vaya usted a
saber...).
Una vez más nunca hubo una disculpa, ni una rehabilitación
pública, ni una simple palabra de comprensión, solidaridad o respeto. Nada extraño
hasta aquí: esa es la moral judeocristiana, que impregna hasta el vómito a toda la
sociedad occidental.
Todas estas persecuciones, mentiras y manipulaciones, como
comprenderás, querid@ lector/a, son motivo más que suficiente como para que los
luciferinos, por el momento, permanezcamos ocultos y manteniendo un "perfil
bajo". Con semejantes antecedentes, nosotr@s no nos sentimos en una sociedad libre y
democrática, dispuesta a respetar y defender nuestros derechos. Así que lo más
inteligente es que los seguidores del Portador de Luz permanezcan, por el momento, en la
cálida y serena Oscuridad, trabajando invisibles en el seno de nuestra Alianza.
Y si eres de l@s nuestr@s, te invitamos a hacer lo mismo.
PIERCING, TATUAJES, DOLOR, REDISEÑO CORPORAL
¿Por qué ese gusto luciferino por los piercing, los tatuajes,
el dolor, la sexualidad no común... qué sois sadomasoquistas, o algo?
¡Ser sadomasoquista no estaría nada mal! Pero no se trata de eso. L@s luciferin@s
tenemos al cuerpo físico como un vehículo y no como un fin en si mismo. Liberadas de la
tiranía del culto al cuerpo perfecto, entendido como "la vasija divina" (!), a
muchas personas les gusta utilizarlo para expresar simbólicamente sus compromisos, sus
proyectos, sus deseos o incluso su propia identidad. Algunos ritos luciferinos incluyen el
uso de estas prácticas, en un entorno de absoluta seguridad y confianza.
¿Son obligatorias estas prácticas?
Nunca. Está totalmente prohibido practicar un rito luciferino, o tomar parte en él, sin
sentirlo y desearlo.
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